viernes, marzo 23, 2007

Diario de un erasmus: día 158

Teaching in England

El Martes fue mi primer día como profesor en tierras británicas. Bueno, realmente como auxiliar de profesor. Inglaterra, y supongo que todo Reino Unido por extensión, tiene un gran problema con la enseñanza (y nos quejamos los españolitos de la ESO). Aquí muy pocos jóvenes quieren prolongar sus estudios más allá de la enseñanza obligatoria. Para ellos es más importante la libra y con cualquier trabajo van a ganar mucho dinero y rápido debido a la ley de sueldos mínimos. Lo fácil, para ellos, es ponerse a trabajar pronto y ascender rápidamente en cuaquier tipo de empleo. Aún me acuerdo de mi manager en el Tiger, Rich, que con sus 27 años seguramente estuviese cobrando mucho más dinero de lo que cobraré yo nunca.

Así pues, los jovenes estudiantes de los colegios no se preocupan por sus notas. Sólamente les importa pasar el curso para terminar lo antes posible. Para ellos las clases no son importantes y se convierten en un pequeño trámite que tienen que pasar porque es así, porque es obligatorio.

Estuve en clases con chavales de 11 a 15 años y pude ver la tranformación de pequeños angelitos a Hooligans pasotas clase a clase. He estado en mitad de un caos, en una clase de no más de 15 personas en la que ni un sólo alumno prestaba atención a lo que el profesor desde la pizarra gritaba. Es completamente indescriptible lo que vi en aquellas aulas. Algo que en mi cabeza no cabía antes de esta experiencia.

Sin embargo, esto es Inglaterra y aquí los problemas se intentan solucionar. Increible despliegue de medios:

- Clases de 45 minutos. (No vayan a perder la concentración).- ¡Profesores auxiliares! (En mi última clase llegamos a estar hasta 3 profesores auxiliares porque el grupo era de unos 25 alumnos).- ¡¡Pizarra táctil!! (Sí, yo tampoco sabía que existía hasta el Martes).- ¡¡Ordenadores portátiles para cada alumno!! (y los trataban como si valiesen dos pesetas).

Mi primera impresión del sistema de enseñanza inglés ha sido de verdadera sorpresa ante la diferencia de sistemas entre el español y el local. ¿El mejor? Todavía es pronto. En Junio opinaré.

No hay comentarios: